“Es fundamental que este mandato continúe existiendo. En todas las regiones del mundo persisten la violencia y la discriminación generalizadas, graves y sistemáticas por razones de la orientación sexual y/o la identidad de género – reales o percibidas – de una persona”, dijo la coalición en su declaración.
“Una decisión de los miembros del Consejo de renovar este mandato enviaría un claro mensaje de que la violencia y la discriminación contra las personas de diversas orientaciones sexuales y/o identidades de género no pueden ser toleradas. Esto reafirmaría que la atención específica, sostenida y sistemática sigue siendo crucial para abordar estas violaciones de los derechos humanos y garantizar que las personas LGBT y de género diverso sean de hecho libres e iguales en dignidad y derechos.”
“Una decisión de los miembros del Consejo de renovar este mandato enviaría un claro mensaje de que la violencia y la discriminación contra las personas de diversas orientaciones sexuales y/o identidades de género no pueden ser toleradas. Esto reafirmaría que la atención específica, sostenida y sistemática sigue siendo crucial para abordar estas violaciones de los derechos humanos y garantizar que las personas LGBT y de género diverso sean de hecho libres e iguales en dignidad y derechos.”
La declaración se realizó en el marco del diálogo interactivo con le Experte Independiente en OSIG, Víctor Madrigal-Borloz, que presentó sus informes sobre su visita a Túnez y sobre la realización del derecho a la salud en relación con el Objetivo de Desarrollo Sostenible nº 3.
Le Experte Independiente de la ONU sobre OSIG tiene el mandato de proponer formas de proteger mejor a las personas que sufren violencia y discriminación basadas en su orientación sexual y/o identidad de género. Para ello, evalúa la aplicación de las normas internacionales de derechos humanos existentes, habla con los Estados y trabaja en colaboración con otros mecanismos regionales y de la ONU para abordar la violencia y la discriminación.
Desde su creación en 2016, este mandato de la ONU ha sensibilizado a todo el mundo sobre el impacto de la criminalización de las relaciones entre personas del mismo sexo y la falta de procedimientos adecuados de reconocimiento legal del género. El mandato ha subrayado el daño causado por las mal llamadas “terapias de conversión”, ha destacado ejemplos de buenas prácticas para prevenir la discriminación y ha afirmado la importancia de la recopilación de datos específicos sobre las experiencias vividas de las personas LGBT y de género diverso.
En 2019, un número creciente de Estados y organizaciones de la sociedad civil apoyaron la renovación del mandato, lo que es “una prueba de [su] importancia crítica y de su labor de apoyo a las personas de diversas orientaciones sexuales y/o identidades de género, y a quienes defienden sus derechos, tanto en los foros internacionales de derechos humanos como sobre el terreno”.
Durante el Diálogo Interactivo se hicieron otras declaraciones de apoyo a la renovación del mandato de le Experte Independiente, tanto por parte de los Estados como de la sociedad civil: una muestra de cómo una fuerte colaboración entre la sociedad civil y los actores gubernamentales puede resultar un éxito para las comunidades LGBT y de género diverso.